Hace nueve años nuestra comunidad camina bajo la protección e intercesión de Santa Juana de Lestonnac.
Este tiempo ha sido bendecido y lleno del señor, cada año agradecemos a Dios por el proyecto y legado que nos dejó Nuestra Señora. En cada celebración recordamos a las hermanas de la Compañía de María, mujeres que al estilo de Santa Juana de Lestonnac nos compartieron sus experiencias y la alegría de vivir el Evangelio.
Hoy como comunidad nuestra motivación es “Mantener la llama encendida” y ”No dejar apagar la luz del Evangelio” para que nos impulse a seguir tendiéndonos la mano unos a otros.
La organización de nuestras fiestas patronales se realizó por parte de los jóvenes. Ellos se unieron para la preparación, la logística, novena, procesión y almuerzo para todos; cada uno puso su granito de arena, pero sobre todo el corazón.